Rebecca Stratton

Orgullo y pasión
Catherina era como una madre para sus dos hermanastros. Pero su padre, al morir, había dejado a los niños bajo la tutela de un pariente desconocido: su tío Stefan Medopolis. Catherina no podía soportar la idea de separarse de los niños, y su único consuelo era acompañarles en el viaje hasta la isla griega donde vivía su tío. Pero Stefan se proponía también gobernar la vida de Catherina, sin tener en cuenta sus sentimientos... A pesar del cariño que sentía por sus hermanos, ¿podría soportar aquella situación?




0 comentarios:

Publicar un comentario